¡Hola!
Tu carta, no sé de qué hablarte, ¡pero bueno te voy contando!
Respecto de tu apodo me gustaba mi chapulín, pero luego pensando chapulín es pequeñito y no te va… Estoy segura de que voy a encontrarte un apodo que se adapte perfectamente a ti, solo que es difícil porque tue eres muy especial, como tú lo dices a veces “un bichito raro que no sé cómo coger a veces“, en ciertas ocasiones, te comparto, he pensado que eres en mi como una especie de HALO, porque yo estoy ahí y tu iluminas mis días, como un rayito de sol, alguien que me cuida como dice la canción que me enviaste.
En fin, igual debe ser porque estoy también muy tragada y me gusta estar así por ti, porque tú también lo estás por mí y es algo como tan mutuo, de dando y dando que me siento bien, no solo por dentro sino al parecer por fuera.
Sabes que eres especial para mí, ocupas un lugar VIP en mi corazón, ¡para que veas pues!, y nada espero el día en que te pueda tocar, abrazar, besar y amar en físico y no por cartas…
¡Si es un amor como de los años 50’s, estaría saliendo de Cali a algún puerto semanas antes para poder llegar a verte el día 31 y solo durar ciertas horas contigo! ¡Y devolverme otra vez en un viaje larguísimo, te imaginas eso! Igual lo haría, con tal de verte de la manera en que quiero verte, es que estás veces que nos hemos visto este año, no han sido como las que nos vimos hace 8, 9 o 10 años no se…
También quiero tu super poder de jugar con el tiempo, porque crearía un mundo contigo por el tiempo que los dos decidamos, y cuando quieras te devuelvo otra vez al inicio, ¡es algo loco que se me acaba de ocurrir! 😮
¡Te amo!